Anatifa o pie de cabra
Una de las criaturas marinas más extrañas que podemos conseguir normalmente dentro de los mercados mayoristas de pescados son los Pollicipes pollicipes, que probablemente conozcas más comúnmente con el nombre de percebes.
Estos animales son unos deliciosos crustáceos que cuentan con la notable peculiaridad de su morfología, la que provoca que todavía en la actualidad sean muchas las personas que los confunden con moluscos.
Los percebes son verdaderas maravillas gastronómicas gracias a su carne que cuenta con un sabor delicioso y completamente inconfundible.
A la parte superior de los percebes se le conoce como capítulo, pero de igual manera puede que las personas le conozcan con el nombre de uña. Esta parte de su morfología se encuentra encargada de proteger a este animal que se encuentra resguardado en el interior del caparazón de los ataques de los diversos depredadores que puedan encontrarse al acecho.
De igual manera, esta parte del cuerpo de los percebes ayuda a que la larva no se seque en los momentos en los que baja la marea, ya que cuando esto ocurre el animal permanece completamente inmóvil en la roca. Puede que parezca ser un dato bastante extraño, pero hay que indicar que la uña del percebe es precisamente la que se encuentra encargada del movimiento del animal, pero de igual manera es la que captura el alimento y ayuda a que se pueda dar la respiración en este crustáceo tan peculiar.
Por lo general, cuando adquirimos percebes en mercados mayoristas de pescado, los mismos vienen acompañados de algunos restos de roca. Esto es de esperarse puesto que estos animales permanecen pegados a rocas hasta que los pescados finalmente se adentren en las rocas cercanas a la costa. Esta característica permite que los percebes sean recogidos de manera artesanal en los momentos en los que baja la manera. Precisamente de este modo de recolección artesanal es que se motiva su elevado coste.
Un dato bastante del percebe es que este es un animal hermafrodita, lo que quiere decir que cada ejemplar cuenta con un sistema reproductor femenino y uno masculina, pero no puede autofecundarse sino que para poder reproducirse necesita de otro percebe.
El valor nutricional del percebe es bastante importante, siendo un alimento recomendado gracias a su alto aporte en proteínas, principalmente conteniendo aminoácidos esenciales. De igual manera, estos animales cuentan con un aporte de grasas muy bajo, una mínima cantidad de calorías y una gran presencia de potasio, magnesio, fósforo, etc.
